Piden a FIFA suspender partidos a temperaturas extremas

La FIFPro solicita al organismo que estipule un límite de temperatura. Si se rebasan los 32 grados Celsius, sugiere que no se juegue

La Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro) llamó a detener los partidos que se juegan en temperaturas extremas luego de que algunos de sus miembros sufrieran en las tórridas condiciones de la Copa de Naciones Africanas y de la Liga española durante el verano boreal.

La FIFPro pidió a la FIFA que estipule un límite de temperatura en el que los partidos deberían posponerse.

Nos gustaría tener este punto de corte por encima del cual el partido no se lleve a cabo, sin importar si es la final del Mundial o un partido de liga«, dijo Vincent Gouttebarge, médico de FIFPro.

La FIFA dice que sus directrices permiten pausas de enfriamiento en los minutos 25 y 70 de los partidos cuando la temperatura de globo y bulbo húmedo​ (TGBH), una combinación de factores que incluyen la temperatura del aire, la humedad, la dirección del sol, la cobertura de nubes y la ubicación del estadio, excede los 32 grados Celsius, o 28 grados Celsius para menores de 20 años y categorías inferiores.

Sin embargo, FIFPro dijo que le gustaría ver pausas de enfriamiento a 28 grados Celsius y no jugar en absoluto si la TGBH supera los 32 grados Celsius.

«Las pautas no bastan para proteger la salud de los jugadores y permitirles rendir al máximo«, afirmó Gouttebarge.

A la FIFPro le preocupan, en particular, algunos partidos de la liga española jugados al mediodía a fines de agosto y los partidos de la Copa Africana de Naciones en Egipto en junio y julio.

«Se programó que algunos partidos se jugaran al sol donde había una temperatura del aire de 34/35 grados Celsius y la humedad era superior al 50 por ciento«, dijo Gouttebarge, y agregó que la federación también recibe quejas de jugadores de América del Norte y del Sur sobre encuentros programados al mediodía en condiciones húmedas y calurosas.

El médico señaló que también se trata de permitir que los jugadores rindan al máximo.

«Es una locura darles a los empleados este tipo de mal ambiente porque no pueden rendir a su nivel óptimo y tampoco es justo para los espectadores que quieren ver a los jugadores en su mejor momento», dijo.

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