La navidad llegó con la fiesta del psicoballet, “Navidad para recordar”

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El psicoballet es una disciplina originaria de Cuba especialmente pensada para ayudar a los niños con necesidades especiales. A la práctica del ballet que todos conocemos, se le suma la teatralización de la coreografía y la supervisión de las clases por parte de psicoterapeutas. Una terapia en toda regla que mezcla el ejercicio físico con las artes escénicas y que tiene infinidad de beneficios para los niños. 

En días pasados el colegio «Espacio Vital» a cargo de la nutrióloga Carolina Huchim Rivas presentó la función «Navidad para recordar» y en la que participaron niños con capacidades diferentes, acompañados con pequeños convencionales. 

Fue la presentación del semestre, una función de navidad y en la que intervinieron 12 niños, de los cuales siete de ellos padece alguna discapacidad, como síndrome de dawn, autismo y síndrome asperger y otros no presentan ninguna, clara muestra de que también se trabaja en la inclusión.

Recordó que en septiembre se hizo la convocatoria para captar a los niños y fue un trabajo de clases constantes. “Ellos trabajan en repeticiones que les ayuda a desenvolver su desempeño.

De acuerdo con Carolina Huchim, además de calificar que su baile sea bonito y sonrían, tienen que apuntar el pie y los brazos, es un esfuerzo variado en cada uno de los niños de acuerdo a su discapacidad.

Previamente se realiza una evaluación con una psicóloga para conocer los alcances y lo que se puede lograr y en base a eso se realiza un plan de trabajo, todo ello con el fin de conocer si el niño puede trabajar en conjunto o de manera individual.

El equipo también lo conforman, además de Carolina Huchim, Reyna Caro, psicóloga; Limbert Lara, maestro en educación especial y cuatro ayudantes como Sharon Santiago, Lilí Cob, María Lara, Azalea Ruiz.

La escuela “Espacio Vital”, se ubica en la calle 44, número 523-D por 73 y 73-A, a tres esquinas de la iglesia de San Cristóbal donde ya se reciben inscripciones y las clases son los martes y jueves de 5 a 6 de la tarde, pero –apartir de enero–, se incorporará, lunes y miércoles, un grupo nuevo para adultos mayores.

Recordó que en agosto pasado se hizo la certificación en Mérida con las cubanas Georgina Fariñas y Cristina Avelar y se hizo la certificación, pero uno de los procesos para lograrlo es crear un grupo, desarrollarlo con una función o puesta en escena.

Todos los logros y avances se archivan para luego ser enviados a Cuba y de esa manera se reciba la retroalimentación de manos de la creadora del psicoballet, Georgina Fariñas.

Uno de los objetivos es que las personas con alguna discapacidad puedan ser independiente y se vayan sintiendo realizadas.

Reiteró que una persona con  depresión también mejora considerablemente ya que  está comprobado que la danza clásica ayuda a mejorar los estados de ánimo, igual que el autismo y síndrome  de asperger y en el caso de las personas con síndrome de dawn, les ayuda mejorar las capacidades motrices