El mamey de Yucatán, con buena posición a nivel nacional

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Por su sabor, frescura y valor nutricional, en esta temporada de calor,  uno de los frutos altamente recomendables para preparar aguas frescas, es el zapote mamey.

De la familia Sapotaceae, el mamey, cuyo nombre en maya es “chacal has”,  se distingue por su forma ovoide,  cáscara delgada con textura áspera en color café claro, pero su pulpa es de sabor dulce en un apetecible color salmón.

El árbol que produce el fruto, es compatible con el cima tropical y normalmente alcanza entre 8 y 10 metros de altura pero puede llegar a los 30 metros.

Desde que se siembra hasta que florea, el mamey  tarda tres años, pero a los 4 años ya genera  sus primeros frutos; pasando los 15 años, cada árbol puede producir hasta media tonelada de frutos, éstos maduran rápidamente durante los meses de abril y mayo, y se cosechan de enero a julio, son  casi seis meses de cosecha.

Una hectárea de mamey con 200 árboles, puede llegar a producir de 20 a 25 toneladas al año.

Como en tantos otros cultivos de árboles frutales, el principal enemigo del mamey es la mosca de la fruta, pero las recientes prácticas de cultivo tienden a ser agroecológicas, por lo que los productores optan por atacar y controlar oportunamente la plaga con trampas elaboradas con envases que contienen proteína hidrolizada combinada con malatión (un insecticida sintético) y feromonas, evitando así el uso de plaguicidas que en su lugar, procuren la inocuidad del fruto.

De acuerdo con el Delegado de la SAGARPA en la entidad, Luis Ernesto Martínez Ordaz, Yucatán es el principal productor de mamey a nivel nacional.

Se cultiva en una superficie de 507 hectáreas distribuidas en los municipios de Akil, que concentra 240 has sembradas, además de Ticul, Tekax y Oxkutzcacab

Precisó que la superficie cosechada es de 447 hectáreas que generan una producción de 11,084 toneladas. 

Esta producción, se comercializa principalmente en el Estado de México y Puebla. Se exporta al mercado internacional de Europa y Asia, generando en total una derrama económica para la entidad, de42.8 millones de pesos.

La estadística nacional indica que la producción total de mamey en México, supera las 17 mil toneladas, gracias a la elevada demanda que tiene a nivel nacional y a su progresivo posicionamiento comercial en el extranjero.

Guerrero es el segundo Estado con mayor producción de hectáreas sembradas, le siguen Quintana Roo,  Chiapas, Michoacán y Tabasco

El 70 por ciento del mamey se compone de agua, contiene cantidades mínimas de calcio, hierro, grasa y  fibra, pero es rico en proteína, sodio, potasio e hidratos de carbono, que le proporcionan dulzura.

Sus propiedades curativas favorecen la cicatrización de heridas, alivia inflamación de los bronquios, dolor de estómago, previene problemas de visión y cardiacos,   promueve la estimulación de colágeno en  huesos y dentina en los dientes, protege el cabello de infecciones,  y su uso cosmético en forma de champú y cremas,  protegen la piel y evitan alergias cutáneas, elimina espinillas, y favorece el crecimiento del cabello, pestañas y  uñas.

En virtud de que el mamey es un alimento de gran valor nutricional, la SAGARPA recomienda consumirlo en rebanadas, postres, aguas frescas, licuados con leche o granizados.

Recuerde consultar a un especialista en nutrición y  consumirlo con moderación si usted padece diabetes