Discurso: Durante el Aniversario Luctuoso de Felipe Carrillo Puerto

Mensaje del Secretario de Desarrollo Social Mauricio Sahuí Rivero durante el Aniversario Luctuoso de Felipe Carrillo Puerto

Gobernar con visión es dejar huella en la historia de nuestras sociedades. Es hacerse grande cuanto más se sirve a los demás. Es dedicar el esfuerzo personal y de grupo para cambiar para bien el destino de muchos. Y queda en la memoria el impacto social de las decisiones tomadas.

Felipe Carrillo Puerto elevó nuestro Estado por sobre el concierto de las demás entidades mexicanas en cuanto a los derechos sociales, el reconocimiento a la mujer y el desarrollo económico equitativo, el reconocimiento de nuestras raíces como la base de la educación. La ideología llevada a la práctica con el rigor que sólo da una intención genuinamente patriótica.

La visión del gobernador progresista que luchó contra la opresión económica a los indígenas y devolvió a la lengua maya su dignidad al pronunciarla desde el balcón central del Palacio de Gobierno, no podía ser otra que dar a Yucatán y a los yucatecos el destino que merece su ancestral grandeza.

Con esa misma perspectiva de presente y esa visión de futuro se gobierna hoy en Yucatán.

Y es que, si en tiempos de Carrillo Puerto el reto era acabar con la explotación del maya yucateco, el principal desafío de nuestra época es conjuntar las fuerzas sociales en un desarrollo integral para el bienestar de todas las familias.

Si antes el reto era el reconocimiento por igual de derechos políticos a mexicanas y mexicanos, hoy el esfuerzo debe encaminarse a demostrar en los hechos una nueva voluntad política, que haga a un lado enconos y reconociendo nuestras diferencias nos haga coincidir en el progreso de la sociedad, que es en esencia bueno para todos.

Si en la época revolucionaria se veía a la empresa con recelo, ahora es nuestra tarea reunir en un engranaje armonioso a la fuerza laboral, el coraje emprendedor de quien invierte y la gestión estatal para generar empleos bien pagados y detonar la vocación productiva de cada región de Yucatán.

Hoy en Yucatán se gobierna con estatura democrática, con la visión de Estado que demuestra Rolando Zapata Bello.

Vivimos tiempos complejos en que la información va y viene a una velocidad que en no pocas ocasiones genera incertidumbre, y sólo con visión de Estado es posible generar certeza y seguridad a la gente. Sólo se superan los retos con trabajo, y sólo con valor se vence a la adversidad.

Ante el reto de la seguridad, de la tranquilidad para las familias, en Yucatán, privilegiamos la sana convivencia y el respeto a los demás; por eso, somos el Estado más seguro de México.

Ante el reto de crear las condiciones para que las empresas confíen en invertir y crecer, en Yucatán, priorizamos la estabilidad y competitividad de la economía interna a la vez que creamos un entorno propicio para que las compañías nacionales e internacionales nos elijan para expandirse; por eso, somos el cuarto estado con mayor crecimiento industrial acumulado durante el 2016 y en lo que va de esta administración hemos recibido más de 990 millones de dólares en inversión extranjera directa.

Ante el reto de diferenciarse en el competido mercado turístico, en Yucatán, con una adecuada política de promoción, conectividad e infraestructura, arropamos, cuidamos y respetamos a los visitantes; sólo en 2016, más de tres millones de turistas visitaron alguno de los paradores turísticos de nuestro estado; un millón más de los que nos visitaban hace cinco años.

Ante el reto global de crear mejores condiciones de vida reduciendo las desigualdades y carencias, en Yucatán, sabemos que la principal política social es la creación de empleos; por eso, entre enero y noviembre de 2016 se generaron más de 18,000 empleos, la cifra más alta en los últimos 16 años.

Estos son resultados que evidencian una visión, trabajo y valor que han dado a nuestro Estado rumbo y transformación social y económica integrales, uniendo a todos los elementos sociales con apertura, diálogo y respeto, en una dinámica que debemos proteger y fortalecer en la transparencia y la armonía social.

Aunque hay diferencias entre los tiempos de Felipe Carrillo Puerto y los nuestros, debemos reconocer que hay compromisos que tienen un carácter permanente y generan retos en la manera de hacer gobierno. Creo que estos retos son la cercanía y el respeto a lo que somos.

Felipe Carrillo Puerto se destacó por convivir con la gente de igual a igual sin importar el lugar ni la circunstancia; de ahí el cariño y el respeto que se le guarda y el valor social de su obra. Ese es el camino que hemos de seguir siempre, ese es el único modo de granjearnos la aceptación de nuestros conciudadanos.

Aunque son herramienta esencial para un gobierno ordenado, hay que mirar más allá de los números, y valorar a las personas. Aún más: debemos considerar las grandes obras y las vocaciones de las regiones de nuestro Estado, pero también dar el lugar digno y respetable que tiene nuestra gente.

Por eso cuando pienso en la apertura este año de las Plantas de Envases Universales y de la Cervecería Yucateca de Grupo Modelo, que representan una inversión de más de seis mil 200 millones de pesos, no puedo dejar de pensar que en Tetiz, doña María Poot Chuc, Beneficiaria del Programa de Producción Social Familiar de Traspatio, ha logrado obtener recursos de la comercialización de hortalizas para que su hija Rosy, la más pequeña de la familia, concluya sus estudios en administración de recursos humanos.

Al reconocer el valor que tendrá la creación de una Zona Económica Especial, que fortalecerá las ventajas competitivas de Yucatán en materia de desarrollo tecnológico y emprendimiento, y complementará el espacio de innovación conformado por el Parque Científico y Tecnológico, también tengo en la mente a la tlapalería “La primera de Dzununcán”, a cargo de Guadalupe Tun Narváez, Elvia y María Dzul Pool, y Martina Chan Hu, que con el apoyo del programa PROIN-Mujer Indígena, emprendieron con éxito en un ramo tradicionalmente a cargo de hombres.

Y cuando me congratulo por la creación de la Universidad Politécnica que colocará a nuestro Estado a la vanguardia en cuanto a la enseñanza de tecnologías de la información, también tengo en cuenta que en Chemax, Florentina Cupul Be, recibió con la estrategia MEJORAR un cuarto adicional y estufa ecológica y con este apoyo su esposo, sus cuatro hijos, nueras y 19 nietos, así como 65 mil familias yucatecas más, tendrán mejores condiciones de vida.

Es verdad, hay que pensar en lo grande, en el desarrollo macroeconómico que implica la gestión empresarial y los elementos que incentiven la inversión, pero también debemos pensar con visión social, dar importancia a lo micro, pensar en la economía familiar, en el bolsillo de los padres de familia. Es decir, desarrollo económico pensando en la gente, inversión que se traduzca en empleos y en bienestar.

Este es un elemento esencial del ideario de Felipe Carrillo Puerto, y una premisa indispensable en la presente administración estatal.

Empezamos 2017 con el reto de fortalecer lo logrado hasta ahora, para consolidar la proyección de futuro de Yucatán.

Ante un escenario económicamente adverso generado por condiciones globales, el gobierno del Estado permanece firme en la defensa de lo logrado, y da certidumbre a los yucatecos con acciones de fortalecimiento de nuestra seguridad y solidarias con la economía de las familias.

Como en todos los contextos complejos, no faltarán los agoreros del desastre, los malintencionados que ven en todo una oportunidad de desear el mal para sacar un falso provecho político. No deben desanimarnos: las mejores obras no surgen del negativismo sino de la voluntad de emprender y sobre todo de generar nuestro propio destino. Eso hacemos en Yucatán.

Los resultados de un trabajo coordinado entre la sociedad civil, la clase obrera, campesinos, empresarios y el Gobierno del Estado, nos dan certidumbre, optimismo hacia el futuro. Creo firmemente que no debemos de mirar hacia atrás, debemos juntos como sociedad, dar continuidad al trabajo y consolidar el esfuerzo emprendido hasta ahora.

Con visión prospectiva, debemos ver un Yucatán próspero y con oportunidades para todos… un Yucatán abierto al mundo, pero orgulloso de las tradiciones de nuestra gente… un Yucatán sin desigualdades que le permita a todos y cada uno de sus habitantes MEJORAR calidad de vida… un Yucatán con el total desarrollo de sus regiones… en el Oriente, como la potencia agropecuaria y turística a la que está destinada a ser… al Poniente, como el enclave industrial de nuestro Estado… a Mérida y su zona metropolitana como el gran centro de servicios y movilidad urbana… en el Norte, como el cluster de innovación y plataforma marítima que le da fortaleza a nuestra economía, y al Sur, con gente preparada, talentosa y con toda la infraestructura que les permita desplegar su potencial agrícola…

Es con unidad y en el reconocimiento de que todos somos importantes donde radica nuestra fuerza para consolidar el Yucatán que deseamos.

Un Yucatán que NO le abruman los retos del futuro, porque HOY se están forjando las bases transformadoras que nos permitan MEJORAR juntos… que nos permitirán vivir con el Bienestar que los yucatecos demandan y merecen.

Este es el Yucatán con el que soñó Felipe Carrillo Puerto y que hoy construimos todos juntos – pueblo y gobierno – con unidad y claridad en el rumbo y confianza en el futuro.