Discurso del Gobernador en el Primer Encuentro Nacional de Operadores de Justicia Penal Indígena y Derechos Humanos

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Mérida, Yucatán, 26 de abril de 2018 .-Muy buenos días tengan todas y todos ustedes, amigas y amigos. Saludo con mucho aprecio y respeto al doctor en Derecho Marcos Celis Quintal, presidente del honorable Tribunal Superior de Justicia del Consejo de la Judicatura del Poder judicial del Estado.

Distinguidas magistradas y magistrados, consejeras y consejeros de este Tribunal Superior de Justicia, les saludo con mucho respeto.

Saludo al licenciado Juan José Olvera López, titular de la Unidad para la Consolidación del Nuevo Sistema de Justicia Penal del Poder Judicial de la Federación, le pido por favor transmita un saludo muy respetuoso al presidente de la Suprema Corte de Justicia y a todos sus integrantes, siempre con el enorme reconocimiento por el papel que desempeñan para la justicia en la nación.

Saludo con mucho respeto a quienes integran este presídium y, de manera muy particular, me permito saludar a todos los representantes de las diferentes etnias, culturas indígenas de nuestro país que se encuentran participando aquí en este importante encuentro. De manera muy particular a los jueces mayas, a quienes saludo y reconozco la labor que realizan.

Hace un momento expresaba el licenciado Juan José Olvera López una reflexión que yo suscribo totalmente: todos tenemos mucho que aprender de nuestras culturas indígenas, de nuestras culturas originarias.

Y en el caso de la justicia indígena no es la excepción, al contrario, las experiencias, los usos, las costumbres, las formas de convivencia que han prevalecido durante mucho tiempo, sin duda, tienen mucho que enseñar en la vida moderna.

Por eso, permítanme en primera instancia reiterar la más cálida y cordial bienvenida al estado de Yucatán a todos los asistentes al Primer Encuentro Nacional de Operadores de Justicia Penal Indígena y Derechos Humanos.

Es un enorme gusto recibirles aquí en la tierra del Mayab, en la tierra de la gran cultura maya, y es por supuesto también un honor ser anfitriones de un encuentro que, estoy seguro, será el primero de muchos.

Porque estos espacios de reflexión, discusión e intercambio de ideas sobre los derechos de la población indígena son un elemento fundamental para el proceso de consolidación del Sistema de Justicia Penal en todo el país.

Y no podía ser de otra manera, tomando en consideración la enorme diversidad cultural, riqueza cultural que existe en las 32 entidades federativas, en toda la gran nación mexicana. De ahí la relevancia de analizar y comparar diversas experiencias que permitan identificar áreas de oportunidad y puntos en común.

En ese sentido, la estrategia que hemos seguido en Yucatán para la implementación del nuevo Sistema de Justicia Penal es una experiencia que puede aportar a este espacio de análisis. Dicha estrategia se construyó a través de un trabajo estrecho y coordinado entre los distintos Poderes y también sumando a profesionales del Derecho, colegios, universidades, organizaciones civiles y todo aquel que estuviera interesado en participar.

Y con el gran apoyo del Gobierno federal, fuimos dando pasos importantes como la construcción de infraestructura especializada y modernización de equipamiento. Así, en junio de 2014 Yucatán logró implementar el nuevo Sistema de Justicia Penal en la totalidad de sus distritos judiciales. Desde el primer año de operación del nuevo Sistema se obtuvieron claros resultados.

Por ejemplo, la frecuencia de acuerdos reparatorios entre las partes aumentó del dos al 10 por ciento y más de la mitad de las sentencias para diferentes tipos de robo fueron obtenidas en 90 días. Con estos resultados, Yucatán inició un proceso de consolidación del nuevo Sistema de Justicia.

Un proceso que hoy, con la firma del convenio entre el Poder Judicial del Estado de Yucatán y el Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya, avanza un paso más. Felicito ampliamente a los representantes de estas instituciones, porque con la firma de este convenio también están consolidando y fortaleciendo a las instituciones democráticas de Yucatán.

Estoy seguro que es un convenio que dará muy buenos resultados a Yucatán. Resultados de fondo, que permitan corroborar los datos y las cifras con la realidad, porque un conjunto de cifras, que a primera instancia pueden reflejar una dirección específica, para los especialistas puede ser materia de análisis, de discusión, de comparativa.

Pero la realidad, generalmente, presenta un panorama más complejo para estudiar. En este caso, lo importante es que los cambios favorezcan a una procuración e impartición de justicia que contribuyan a fortalecer nuestro tejido social y eso significa garantizar los derechos de todas las personas.

En el caso de las comunidades indígenas, significa también considerar el respeto a sus usos y costumbres. Es el reconocimiento a otras maneras de ver el mundo y, por ende, a otras interpretaciones muy válidas de la impartición de justicia.

Por eso es clave que, en el marco de la consolidación de un nuevo esquema procesal, se analicen aspectos como la acreditación de la condición de persona indígena y la aplicación de usos y costumbres. Porque, sin duda, permitirá a las entidades federativas comparar y enriquecer sus propias experiencias.

Y estoy seguro que en el desarrollo de este evento se avanzará de manera muy positiva en dicho análisis. Con estos buenos propósitos, para mí es muy satisfactorio que sea precisamente aquí en Yucatán el primer lugar en donde se realice este Encuentro.

Porque como decía hace un momento, seguramente será una gran experiencia que dará cauce, que dará pie, a encuentros subsecuentes en el futuro que vayan consolidando, precisamente con el trabajo de todas las instituciones, esa visión de un nuevo Sistema de Justicia Penal que respete los derechos y que garantice una sana impartición de justicia.

Les esperamos de vuelta aquí en Yucatán para próximas ediciones y concluyo reiterándoles la más cordial bienvenida a nuestro estado, deseándoles el mayor de los éxitos. Muchas gracias.