Atacar la ciencia.

Dr. Adán Echeverría-García.

No hay que confundir los términos. Las generalizaciones jamás serán bienvenidas. No, no todos los sacerdotes católicos son pederastas, como no todos los homosexuales son gente pervertida que dañará a los demás. El ser humano vive en la libertad que le permite el contrato social en el que desde la infancia se desenvuelve. Los paradigmas culturales, sociales y morales sobre los que crecemos y nos desarrollamos.

De la misma forma no todos los trabajadores son muertos de hambre a los que debemos tratar con la punta del pie, pensando que se deben exclusivamente a los patrones que los contratan. Y lo mismo ocurre en las universidades y centros de investigación que son parte del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT).

Y por ello debemos respetar como exigir a los investigadores, doctores, científicos que pertenecen al Sistema Nacional de Investigadores (SNI). No es posible que se esté fraguando una persecución desde el nuevo gobierno electo, con el fin de recortar los presupuestos a la ciencia.

Las revisiones que se hacen y deben alcanzar a los que hacen ciencia en México, no pueden estar tasadas desde la venganza ni con la idea preconcebida de que los investigadores en alguna categoría del SNI, son corruptos, o son doctores que solamente se sientan en sus oficinas a recibir el dinero que el CONACYT les entrega mes a mes. Pensar de esta forma es caer en el prejuicio. Las revisiones, respecto a sus logros y su dedicación, deben hacerse conforme a lo que cada investigador pueda y debe defender sobre los temas de investigación que desarrolla y por el cual recibe ese estímulo de parte de la federación.

Si estos doctores hacen uso adecuado del recurso que se les entrega o no lo hacen. Y lo mismo ocurre con todos los doctores o catedráticos investigadores que laboran en los diferentes Centros de Investigación del CONACYT. Estos, los que no tienen aún el SNI, no deben pensar que por no estar en este Sistema valen menos que los que han logrado entrar.

Las posibilidades de la corrupción en la ciencia mexicana, ocurre lo mismo que la corrupción dentro del sistema nacional para la cultura y las artes (SNCA), no menos y no más, y no se debe generalizar sobre que todos los que pertenecen a estos sistemas son o no son corruptos. Hagan las investigaciones, indiquen los hallazgos, sus logros, y que se establezcan con claridad los indicadores de que tanto la ciencia como el arte en México va en orden ascendente, o sepamos realmente cuáles son los logros que, como sociedad mexicana, tenemos en materia de ciencia, tecnología, cultura.

No podemos permitirnos el cierre de los centros de investigación, ni el despido de sus investigadores, como tampoco podemos permitirnos el cierre de las convocatorias para ingresar al SNI ni al SNCA. No se pueden cancelar los apoyos a la ciencia en México, al contrario, es imperativo aumentar el presupuesto que destinen al impulso de la Ciencia en México, imperativo construir mayores espacios para el desarrollo tecnológico, brindar apoyos a la investigación, a los investigadores, a las universidades y a los centros de investigación de nuestro país.

Es necesario revisar las capacidades de liderazgo de los Coordinadores Generales de los Centros de Investigación, sobre todo de aquellos que pretenden tener como servidumbre al personal que trabaja en dichos centros, amenazándolos con no permitirles el desarrollo de sus procesos de investigación, con el continuo decirles que “Si te quito el trabajo te mueres de hambre”, con el que algunos y algunas pretenden tener sometidos a su personal, incluso a quienes incluso tienen el grado de doctor.