América agazapado caza al tigre en su cueva

América con precisión de samuráis, toma ventaja de 2-0 sobre Tigres a domicilio en la ida de la Final de la Concachampions y casi está en Japón

SAN NICOLÁS DE LOS GARZA, México. Abr. 21, 2016.- Sigiloso pero mortífero, paciente en espera de su presa, movimientos imperceptibles pero eficaces. América se está tomando muy en serio la posibilidad de regresar a Japón y este miércoles mostraron todas las cualidades que tienen los legendarios samuráis del país del sol naciente.

Las Águilas lograron una importante ventaja de 2-0 ante Tigres en el Estadio Universitario, dentro de la ida de la Gran Final de la Concacaf Liga de Campeones, lo que les pone prácticamente en la próxima Copa Mundial de Clubes de la FIFA Japón 2016.

El festín azulcrema inició desde la banca. Con bajas en el cuadro titular y en la banca, Ignacio Ambriz dispuso un esquema de juego impecable, para maniatar a su poderoso rival y herirlo a la vez. En muy pocas ocasiones se puede encontrar un triunfo tan redondo de América en San Nicolás de los Garza, un volcán tan apagado que incluso una estufa produciría más calor.

Con la calidad de jugadores que posee el técnico Ricardo Ferretti, los norteños fueron capaces de generar llegadas. En la primera parte, Javier Aquino desperdició una oportunidad dorada cuando a los 32′ mandó una pelota a la tribuna en posición inmejorable . Nueve minutos antes, Juninho puso a temblar a la defensa visitante con un violento cobro de tiro libre que se fue a milímetros del travesaño.

Los de Coapa salieron enchufados en el complemento: un pase de tres dedos de Osvaldo Martínez encontró a Darío Benedetto. El argentino simplemente empujó la pelota en una portería que había quedado huérfana ante la salida de Nahuel Guzmán a los 48′. El gol retrasó líneas en las Águilas y aumentó la desesperación de los universitarios.

Sin la intensidad de antaño, un André Pierre Gignac errático (el francés erró un disparo en su zona de confort a los 81′) y sin el alma de un volcán, Tigres inclinó la cancha a su favor a base de posesión, mientras que América, ya con línea de cinco con la entrada de Pimentel por Benedetto, lograba contragolpes con ventaja numérica, aunque ninguno con resultados esperados.

Ya en tiempo de compensación y con un Tigres rendido ante la impotencia, Osvaldo Martínezsacó un brutal disparo desde fuera del área que fue sin escalas al fondo de las redes, el 0-2 que obliga a pensar que la Final tiene rumbo definitivo, aunque Tigres tiene un muy buen recuerdo de remontadas ante América (Apertura 2005).

América tiene todo por ganar. La revancha en el Mundial de Clubes luce cada vez más cerca y solamente unos felinos imparables podrían detener en el Estadio Azteca la próxima semana que un grupo de guerreros del antiguo Japón surgidos en Coapa lleguen a defender su título.